¿Cómo cuidar mi salud digestiva?
El último trimestre del año caracterizado por Halloween, día de los santos, convivios, posadas, navidad y año nuevo, es época de alegría y compartir con familia y amigos, de la mano con la tradicional gastronomía de la época. Sin embargo se debe tener en consideración algunos aspectos para no pasarla mal, sobre todo si tienes diagnóstico de algún padecimiento digestivo.
Acá hay algunas recomendaciones para tu salud digestiva relacionadas con la época de fin de año:
Evita comer en exceso, especialmente si padeces de reflujo o gastritis
Comer en exceso aumenta la presión dentro del estómago, lo cual puede empujar el ácido gástrico hacia el esófago, causando reflujo. Además, comer grandes cantidades obliga al estómago a producir más acido para digerir los alimentos, lo que puede irritar la mucosa gástrica, empeorando la gastritis. Un consejo adicional es comer porciones pequeñas y frecuentes, evitando acostarse justo después de las comidas, ya que la posición horizontal facilita el reflujo.
Evita consumir exceso de grasa y condimentos
Las grasas ralentizan la digestión, lo que hace que los alimentos permanezcan más tiempo en el estómago, aumentando las posibilidades de reflujo. Además, los condimentos, especialmente los picantes y el ajo o la cebolla, pueden irritar el revestimiento del estómago y causar molestias. Optar por grasas saludables, como el aceite de oliva o aguacate, y reducir el uso de condimentos picantes puede ayudar a evitar molestias digestivas y mejorar la salud intestinal.
No abuses del consumo de alcohol y bebidas gaseosas
El alcohol y las bebidas carbonatadas pueden causar hinchazón y aumentar el ácido en el estómago, exacerbando condiciones como el reflujo y la gastritis. Además, el alcohol irrita la mucosa gástrica y puede dañar el hígado y el páncreas con el tiempo. Optar por agua y bebidas no carbonatadas ayuda a mantener un sistema digestivo saludable y evita la hinchazón.
Evita comer a altas horas de la noche
Comer cerca de la hora de dormir puede interferir con la digestión, pues el metabolismo es más lento por la noche. Esto puede provocar reflujo y otros problemas digestivos. Es recomendable cenar al menos dos o tres horas antes de acostarse, y optar por una comida ligera, rica en proteínas y baja en grasas, para evitar molestias durante el sueño y mejorar la calidad del descanso.
Limita el consumo de comida chatarra a una vez por semana
La comida rápida suele ser alta en grasas saturadas, azúcares y sodio, lo cual puede contribuir al aumento de peso y a problemas cardíacos. Limitarla a una vez por semana no solo ayuda a mejorar la salud general, sino que permite mantener un equilibrio. Es importante equilibrarla con una dieta rica en frutas, verduras, proteínas magras y carbohidratos complejos.
No fumes
El tabaco afecta el sistema digestivo, promoviendo la producción de ácido gástrico y debilitando el esfínter esofágico inferior, lo que puede causar reflujo. Además, fumar es un factor de riesgo para enfermedades graves como el cáncer de estómago y de esófago. Dejar de fumar mejora la salud a nivel general y disminuye los riesgos de enfermedades crónicas.
Continúa con tu actividad física de rutina, y si aún no practicas alguna, es buen momento para empezar.
El ejercicio regular mejora la digestión, ayuda a mantener un peso saludable y reduce el riesgo de enfermedades como la diabetes y problemas cardiovasculares. Incluir al menos 30 minutos de actividad física diaria (caminar, trotar, nadar o practicar deportes) mejora el estado físico y mental. Además, ayuda a liberar endorfinas, que contribuyen a un estado de ánimo positivo y reducen el estrés.
Dr. Alejandro Velasco – Gastroenterólogo
Etiquetas: colon, dolor de estómago, exceso, fin de año, gastroenterologia, gastroenterólogo, inflamación, reflujo, salud digestiva